Si bien disminuyó el nerviosismo previo respecto de la elección general el blue cerró en $ 950 y la inflación apunta a los dos dígitos mensuales.
La ciudadanía argentina acudirá a las urnas el próximo domingo para elegir un nuevo presidente con el dólar y la inflación sin dar respiro y limando el poder adquisitivo, pero en un clima de menos nerviosismo respecto a lo que sucedió en la previa a la elección general.
El dólar cerró la última jornada hábil antes de las elecciones por debajo de los valores de pánico que se pagaron el viernes 20 de octubre. El “blue” completó la rueda de hoy a $ 950, unos $ 250 por debajo de los $ 1.200 que llegaron a pagarse en las 48 horas previas a la primera vuelta.
Desde aquel pico en el que confluían incertidumbre y temor, la divisa comenzó un descenso hasta un piso de $ 910 para reactivarse en las últimas ruedas producto de la nueva cobertura electoral.
A partir de las generales hasta hoy el Gobierno buscó controlar el precio de la divisa en el mercado paralelo repitiendo allanamientos y operativos de inspección en supuestas “cuevas” financieras de la city porteña, mientras que sostuvo la intervención en las opciones bursátiles.
A consecuencia de esta acción, la operatoria de dólares en la Bolsa de Comercio también tuvo un cierre calmo. El MEP y el Contado con Liquidación (CCL), que supieron coquetear con valores cercanos a los $ 1.000, este viernes sufrieron leves variaciones, quedando en $ 872,61 y $ 875,73, respectivamente.
La actividad cambiaria y bancaria se reanudará el martes 21 de noviembre dado que el próximo lunes es feriado nacional.
De allí que el resultado de la elección será decisivo, dado que si el triunfador es Sergio Massa podría comenzar a tomar medidas en forma inmediata, mientras que en caso de que sea Javier Milei habrá que ver qué posición adopta el equipo económico.
Pese a este escenario, el Ministerio de Economía convocó a una licitación para el martes con el objetivo de renovar vencimientos por $ 1,3 billones, lo cual se convertirá en el primer pronunciamiento del mercado ante el presidente electo.
En tanto, a fuerza de seguir postergando importaciones el Banco Central compró U$S 1 millón y sumó en el mes U$S 450 millones, millones, aunque muy lejos de los objetivos de acumulación previstos.
A su vez, actuando dentro del marco de crawling peg la autoridad monetaria ajustó el dólar mayorista a $ 354,05 y el oficial pasó a $ 369,50. En consecuencia, el valor del dólar para los consumos con tarjetas subió a $ 743,10.
Inflación en nuevo escalón.
La inflación parece haberse asentado en nuevo escalón de dos dígitos mensuales, de acuerdo a los últimos cálculos oficiales y privados.
La medición semanal del Ministerio de Economía difundida hoy señaló que entre el 6 y el 12 de noviembre los precios subieron 2,2% y en el agregado de las cuatro semanas previas la variación fue de 9%.
Esta velocidad confirma que la inflación mensual volverá a situarse por encima del 10%.
En el relevamiento semanal oficial se destacan subas por encima del promedio en alimentos y bebidas de almacén (3,4%), frutas, (3,3%), carnes 2,8% y precios regulados (2,9%). En cambio subieron por debajo del promedio indumentaria (1,4%) y verduras (2,1%).
El informe que elabora la Secretaría de Política Económica corrigió además a la baja sus estimaciones previas a partir de la medición del INDEC que informó una suba de precios de 8,4% en octubre.
La dependencia a cargo de Gabriel Rubinstein dijo que la diferencia con la medición que ellos realizan (que dio por encima de 9%) se detectó en la forma en que se evaluó el comportamiento del rubro verduras e indumentaria. Las correcciones fueron entre 0,5 y 0,6 puntos porcentuales en los acumulados semanales.
Esta corrección despertó comentarios críticos de economistas, quienes reclamaron una mayor transparencia en la forma en que se realizan estas mediciones.
Por su parte, la medición semanal de la consultora LCG señaló que en la semana del 9 al 15 de noviembre los alimentos subieron 1,6%. En la medición punta a punta de las cuatro semanas previas el alza es de 7,9%. En tanto, en la primera quincena la suba acumulada es de 3,7%.
En el caso de Eco Go el resultado es similar, con un incremento semanal de 1,7%.
“Con este dato y considerando una proyección de variación semanal promedio de entre 1,5% y 3% para las próximas tres semanas del mes, la inflación de alimentos consumidos en el hogar en octubre treparía a 13,4% mensual. Si consideramos además la evolución de los alimentos consumidos fuera del hogar (13,2%), la inflación en alimentos alcanzaría el 13,4%”, resumió la consultora.
Para la Fundación Libertad y Progreso en las primeras dos semanas de noviembre la inflación fue de 8,8% “con lo que el mes apunta a cerrar en torno al 11%”.