La sumatoria de estos factores impulsó el alza de la divisa, que así rompió con casi dos meses de fluctuaciones en la zona de los $ 490. Expectativa por una posible conferencia de prensa del FMI.
El dólar “blue” superó este miércoles la barrera de los $ 500 producto de una serie de factores que confluyeron en las últimas tres ruedas e hicieron que saliera de la mediana estabilidad que mantuvo durante casi dos meses.
En la City porteña la divisa informal cerró a $ 503 para la venta, valor que en las plazas del interior se elevó hasta los $ 508.
El salto de $ 11 durante las primeras tres jornadas de esta semana tiene razones económicas, pero al mismo tiempo un alto componente de expectativas.
Si bien el gobierno mantuvo la intervención en todos los mercados no pudo evitar que la cotización quebrara la psicológica barrera de los $ 500; “un yaguareté”.
Entre los factores económicos hay que subrayar el impacto de la inflación que provoca que un precio más del sistema como es el del dólar suba por mayor demanda.
Si observamos la cotización del “blue” en las últimas semanas vemos que el 23 de mayo cerró a $ 490, hasta ese momento el máximo del año. Los $ 503 de hoy representan un alza de 2,6%, cuando en el mismo período la inflación acumulada roza el 14%.
Si nos remontamos a lo que sucedió desde el 1° de enero -dólar a $ 346- la suba del “blue” es de 45,3%, contra una inflación del orden de 55%. Por tanto, el movimiento de los últimos días no hace más que acompañar el aumento de precios generalizados.
El segundo factor económico es el aguinaldo que los asalariados comenzaron a percibir en la primera quincena de julio y que un sector limitado de la población puede destinar para atesoramiento.
En este grupo también se puede incluir, aunque en menor medida que en el verano, a turistas que viajarán al exterior durante las actuales vacaciones de invierno.
En el plano de las expectativas, la proximidad de las Primarias Abiertas y Simultáneas (PASO) juegan un rol preponderante dado que ante cualquier proceso electoral el público decide dolarizar sus carteras como mecanismo de protección ante diversas eventualidades.
Pero sin dudas uno de los factores que mayor incertidumbre está aportando a la economía es la postergación de la firma del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El organismo aún no confirmó si mañana retomará las habituales rondas de prensa que ofrecía en Washington en forma quincenal.
El último contacto oficial del FMI con los periodistas fue el 8 de junio y se espera que mañana se reanude la convocatoria dado que desde el próximo lunes 17 el organismo entra en receso por dos semanas. Cabe aclarar que en estos diálogos que encabeza la vocera Julie Kozack el temario es amplio y no se centra en el caso argentino, pero sin dudas en las actuales circunstancias será una pregunta de rigor que la portavoz no podrá eludir.
El silencio del FMI, más las continuas contradicciones que surgen desde el Palacio de Hacienda no contribuyen a generar un clima propicio que amortigüe las tensiones en el mercado cambiario.
Durante las últimas 48 horas trascendió desde el entorno del ministro de Economía, Sergio Massa, que el viaje a Washington para cerrar el acuerdo “era inminente”, sin embargo, aún no está confirmado y ya no queda tiempo fáctico para que se efectúe con éxito; a menos que se modifique el habitual plazo de descanso de los funcionarios del FMI.
Dada esta situación, Argentina se encamina a tener que pagar U$S 2.700 millones con recursos propios el próximo lunes 31 de julio, producto de la unificación de vencimientos del mes.
En medio de este escenario el Banco Central continúa cediendo reservas y la situación se agrava porque además de dólares ahora también vende yuanes.
Según trascendió de operadores de mercado, el BCRA entregó en la rueda de hoy U$S 22 millones y 535 millones en yuanes.
Aunque con un ritmo menor, las cotizaciones bursátiles del dólar también subieron. El MEP avanzó a $ 488,01, mientras que el Contado con Liquidación (CCL) lo hizo a $ 502,11.
La devaluación oficial fue de apenas 0,13% y la divisa pasó a costar $ 276,89. El mayorista aumentó 0,32% a $ 264,05 y en el Banco Nación cerró a $ 275,50.