Desde que el Ministerio de Transporte anunció la posibilidad de renunciar al subsidio de pasajes de trenes y colectivos, solo un 0,007% de los 14 millones de usuarios con Tarjeta SUBE del país adhirieron. Con Mendoza fuera de este programa, quienes accedieron a renunciar al subsidio pasarán a pagar la tarifa plena de los servicios.
Hasta el momento, tan solo 987 personas solicitaron la renuncia voluntaria al subsidio a los pasajes de trenes y colectivos en la primera semana de vigencia. La noticia trascendió según lo indicado por fuentes del Ministerio de Transporte a Télam, lo cual representa un 0,007% de los 14 millones de usuarios con Tarjeta SUBE del país.
Quienes accedieron a renunciar al subsidio pasarán a pagar la tarifa plena de los servicios, de $700 en el caso de los colectivos y de $1.100 para los trenes, en el caso del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Aun así, quienes no quieran renunciar al subsidio, no tendrán necesidad de realizar ningún trámite y seguirán pagando las mismas tarifas vigentes.
La medida había sido anunciada formalmente el 16 de octubre por el ministro de Transporte, Diego Giuliano, y desde el viernes 20 está disponible el formulario para formalizar la opción en el sitio web argentina.gob.ar/sube.
SIN SUBSIDIOS: EN AUTOMÁTICO
En ese marco, durante la primera semana de vigencia, quienes renunciaron al subsidio tenían que manifestar, en el caso de los colectivos, su voluntad de pagar la tarifa plena antes de apoyar la tarjeta en el lector. Desde hoy, en cambio, las solicitudes se reflejarán de manera automática a la hora de realizar el primer viaje después de completar el formulario, sin necesidad de avisarle al chofer.
En el caso de los trenes regionales y de larga distancia donde aún no está habilitado el pago vía SUBE, se debe indicar en la boletería que se quiere pagar sin subsidio para que se cobre la tarifa correspondiente. Además, quienes renuncian al subsidio, también dejarán de recibir el beneficio de la Tarifa Social, que permite, reunidos determinados requisitos de vulnerabilidad social, viajar con un 55% de descuento adicional.
Del mismo modo, estos usuarios tampoco recibirán descuentos en las combinaciones de transporte (Red SUBE), sistema que permite pagar un 50% en el segundo viaje y 75% a partir del tercero en un periodo de dos horas, lo cual, en la práctica, es también un subsidio al pasajero frecuente. La medida abarca a los usuarios de transporte automotor de líneas de jurisdicción nacional, es decir, las líneas que circulan en el AMBA y los trenes de todo el país.
“El usuario tiene la libertad de elegir si quiere mantener el subsidio o no”, señalan los carteles que informan de esta posibilidad que llevan el logo del Ministerio de Transporte y que fueron colocados la semana pasada por la Comisión Nacional del Transporte (CNRT) en los colectivos. Esto se suma a la aclaración, al pagar el boleto en las máquinas lectoras de la tarjeta SUBE, del valor de la tarifa sin subsidio.
Por su parte, el ministro de Transporte Diego Giuliano sostuvo, en ese entonces, que las personas que tienen una posición ideológica similar a la de la ex candidata de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich y la del candidato de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei ahora tienen la opción de desistir de los subsidios que existen en la actualidad en la tarifa de colectivos y trenes.
“La consecuencia de lo que proponen Bullrich y Milei es que la tarifa cueste $700 el colectivo y $1.100 el tren. Nosotros entendemos que el transporte tiene un sentido social”, señaló el ministro. Además, el funcionario señaló que para el ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, el subsidio “es una inversión pública que dinamiza la economía y que no solamente beneficia al que se sube al colectivo o al tren”.