Increíble: lo pararon en el aeropuerto por exceso de equipaje, pero resultó ser el hombre con el pene más largo del mundo

Increíble: lo pararon en el aeropuerto por exceso de equipaje, pero resultó ser el hombre con el pene más largo del mundo
El hombre del pene más largo del mundo

Ocurrió en San Francisco. Los uniformados vieron algo extraño en la entrepierna de un pasajero y decidieron registrarlo, por cuestiones de seguridad.

Los oficiales del aeropuerto internacional de San Francisco, en Estados Unidos, se enfrentaron a una situación muy incomoda debido a las caracteristicas fisicas de un pasajero.

Se trata de una anécdota que ocurrió hace algunos años, pero que sigue siendo comentada hasta el día de hoy. Todo empezó en la zona del escaner de rayos X.

Los uniformados vieron algo extraño en la entrepierna de un pasajero y decidieron registrarlo, por cuestiones de seguridad. Las autoridades personas que el hombre de 41 años podría estar escondiendo un arma de fuego.

Jonah Falcon, el hombre con el pene más largo del mundo - Gentileza New York Post

Sin embargo, cuando los agentes palparon a Jonah Falcon se dieron cuenta de que en realidad no escondía nada, más allá de su propio cuerpo.

“Uno de los guardias me preguntó si mis bolsillos estaban vacíos y le dije que sí. Otro me detuvo y me preguntó si yo tenía algún tipo de tumor. Yo sólo tenía mi ‘bulto’ sujetado a la izquierda de mi pantalón y no estaba erecto en ese momento”, relató a The Huffington Post.

Falcon es un actor y periodista que en 1999 cobró cierta fama luego de que apareció en el documental Private Dicks: Men exposed de HBO. Fue durante ese show que se ganó el titulo de el hombre con el “pene más largo del mundo”.

Su miembro mide 22,5 centímetros cuando está flácido y alrededor de 34, erecto. A partir de este show televisivo, el neoyorkino se transformó en una celebrity y empezó una gira mediática que incluyó entrevistas para Rolling Stone y reportajes con figuras como Howard Stern.

Falcon también recibió muchas propuesta para trabajar en la industria de entretenimiento para adultos, pero no le interesó. “Si hago pornografía, nadie me va a tomar en serio”, declaró.

“Él me dio una palmadita abajo, pero se aseguró de no tocar mis partes con las manos. Incluso me puso un poco de polvo en mis pantalones para testear la búsqueda de explosivos. Me pareció divertido. No estaba preocupado. ¿Qué era lo peor que podía pasar? ¿Que tuviera que mostrar mi cuerpo? Estoy acostumbrado”, agregó.

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