Marcos se consagró como el ganador del reality más visto de la televisión argentina. En diálogo con Los Andes habló de su familia, su pasado en Salta y qué va a pasar con su ex.
Del otro lado del teléfono, Sabrina, la productora de Telefe que hace de Nexo entre Marcos Ginocchio y yo. Hace muy poco que le dieron su celular y desde la producción de Gran Hermano cuidan, celosos, lo que queda de aislamiento para que no le explote el teléfono.
“Ya te paso a Marcos”, dice apurada mientras debe estar contando los segundos para correr a otra nota. “Hola, Emilia”, se escucha con un tonito salteño inconfundible. El que saluda es Marcos Ginocchio, el hombre del momento. El ganador de “Gran Hermano”.
Un hombre que rompió todos los estereotipos de participante de un reality. Lejos de las polémicas y siempre con un bajo perfil, marcó un camino con entereza, principios y don de buena gente. Ese mismo camino que lo llevó a la final y, con el voto del público, se consagró como el gran ganador de “Gran Hermano”.
En sus primeras declaraciones afuera de la casa, le preguntaron por el premio y fiel a su estilo, y sin defraudar a quienes lo votaron, dijo que iba a usar esa plata para ayudar a los chicos de la calle. Un distinto.
No me queda más que felicitarlo. Vi todo el reality. No solo por un interés periodístico, sino porque quería. Me encantó. Fue, lejos, el mejor “Gran Hermano”. Y los números, y el fervor popular, lo confirman.
Los minutos corren y él en esa vorágine mediática, Marcos se toma un tiempito para hablar con Diario Los Andes.
-¿Cómo estás viviendo estas horas en el “mundo real”? Ir de programa en programa, el cariño de la gente. Es un montón en poco tiempo.
-Sí, es locura. Todavía no caigo. Es hermoso recibir todo el apoyo y el amor de la gente. Es muy lindo todo el amor que me están dando y, bueno, todavía no caigo del todo.
-En varias ocasiones, cuando te preguntaron por qué entraste a “Gran Hermano”, dijiste que “por la experiencia”, ¿a qué te referís con vivir la experiencia?
-A ponerse a prueba. Lo tomé como un desafío en el que podía aprender muchísimas cosas. Y bueno, creo que viviendo esta experiencia aprendés un montón de cosas. Es muy lindo disfrutar de los momentos y creo que el tiempo que pasé dentro de la casa fueron únicos, así que estoy tan contento por eso.
-¿Era la primera vez que estabas tan lejos de tu casa, separado de tu familia?
-Sí, en tiempo fue lo más lejos que estuve de ellos.
-Bueno, ahora cambió todo radicalmente, pero contame, ¿cómo era tu vida, tu cotidianeidad, en Salta?
-Vivía con mi mamá y entrenaba mucho jiujitsu. También hacía otros deportes. Jugaba al fútbol con mis amigos, pero también me gusta mucho el pádel y el tenis. Siempre fui de practicar mucho deporte, creo que me gusta mucho porque te despeja demasiado la cabeza y lo disfruto, más cuando estoy con mis amigos. Disfruto del deporte, sobre todo para despejarme de las cosas que por ahí te pesan día a día.
-¿Qué es lo que más te pesa?
-La cotidianeidad de las cosas que nos pasan a todos. Con el deporte es como que uno las puede liberar.
-También hablaste de la fe. La que te ayudó a salir de esa etapa oscura en tu vida fue la fe.
-Lo siento muy presente a Dios y creo que eso es muy lindo en mi día a día porque disfruto mucho hablar con él, rezar y agradecerle. Siento que así mi día es completo y me gusta mucho.
-No es “común” encontrar un chico tan joven y tan devoto. En épocas en donde todo es tan superficial y los ídolos son de cartón, vos no escondés, para nada, tu amor por Dios y la religión.
-No, para nada, estoy superorgulloso. Me da orgullo porque siento mucho amor por Dios y siento que está presente en mí todos los días.
-Hablaste de tus amigos, ¿cómo es el Marcos amigo? ¿Salen mucho o prefieren juntadas más tranquilas?
-Somos bastante de salir a comer. Nos juntamos mucho a jugar al fútbol y hacemos muchas cosas. En Salta hay muchos senderos, muchos ríos, está el dique Cabra Corral también, que es hermoso, así que hacemos muchísimas actividades al aire libre y las súper disfrutamos.
-¿Volvés a Salta o te quedás un tiempo en Buenos Aires?
-El martes, tal vez, vuelvo a Salta. Quiero estar con mi familia.
-Se habló un montón de tus valores. ¿Te incomoda que te pongan en ese lugar de “modelo de lo que hay que ser”?
-Yo disfruto mucho ser así porque siento que las personas que quiero y que tengo cerca también disfrutan estando conmigo de esa manera. Poder expresarlo para otras personas también es muy bueno para mí y así lo disfruto yo.
-Todos fuimos testigos de tu encuentro con tu papá, tu hermana y tu hermano, pero a tu mamá sólo la vimos en la última gala. ¿Cómo fue reencontrarte con ella?
-Fue muy lindo, súper lindo. La verdad que no la veía desde hace tanto y verla fue tan emocionante. Ella es super tímida y reservada, y verla ahí me sorprendió porque se animó. Fue hermoso. Ahora cuando vaya a Salta vamos a poder compartir muchísimo más.
-¿Te imaginás ese primer encuentro en soledad, sin las cámaras?
-Sí, la verdad que tengo muchas ganas de que pase.
-Me imagino un asadito, ¿no?
-Sí, y también con mis amigos, que no los veo hace tanto y también los extraño, seguramente hagamos muchas comidas.
MARCOS Y EL MISTERIO DE SU ¿EX? NOVIA
-Bueno, te tengo que preguntar lo que todo el mundo quiere saber. ¿Pudiste hablar con tu ex novia o estás esperando llegar a Salta?
-No, la verdad, que todavía no pude hablar, pero bueno, no sé qué haremos. No tengo ni idea, creo que los tiempos ahora no ayudan. Estoy muy corto de tiempo, sigo aislado en el hotel y haciendo muchísimas cosas, así que bueno, no sé qué será.
-¿Pero vos tenés ganas de volver?
-La verdad es que tenemos que ver qué es lo que pasa y ver qué dice ella también.
-¿Qué tiene ella que te cautivó? ¿Qué te enamoró?
-Desde un principio nos llevamos muy bien, teníamos muy buena relación y siento que fue muy compañera en todo sentido. Por ejemplo, con mi familia, cuando quizá yo no podía estar presente, ella estuvo para ellos y tienen muy buena relación. Eso lo valoro muchísimo. Lo que más resalto de ella es el compañerismo.
-¿Comparten los mismos gustos por la religión y el deporte?
-Sí, también. Tenemos los mismos gustos.
-Bueno, y la otra pregunta que todos quieren saber... ¿te vas a cortar el pelo o te quedas con este look de jopo largo?
-(risas) Creo que me lo voy a dejar así. Me molestaba en el verano por el calor, pero ahora que se fue un poco el calor, no me molesta tanto, así que quizá lo deje.