La modelo y conductora se conmocionó sobre el final del programa con lo que va a hacer Mariano, empleado de seguridad, para su hija con el dinero.
Mariano Cáceres se presentó este lunes en Los 8 escalones de los 3 millones y emocionó hasta las lágrimas a muchos tras consagrarse como ganador. El concurso del que forma parte Pampita tiene estos momentos que son los que trascienden.
El participante nacido en Santiago del Estero se anotó por iniciativa propia, y con un objetivo muy claro: lograr recaudar dinero para poder pagar el tratamiento médico de su hija.
“Soy empleado de seguridad privada”, contó cuando se presentó y luego explicó el fin del dinero en caso de ganar: “Trataría de solventar el tratamiento de mi hija que es paciente oncológica aquí en Buenos Aires”. “En el Garrahan, en el espectacular Garrahan”, comentó Guido Kaczka.
“La desesperación de un papá y las ganas de salir adelante lo llevaron a que se anote en el programa del 13 y en una semana lo llamaron. Ellos están hace dos meses en el Buenos Aires”, comentó la mamá de Agus, Noelia Salvatierra que se quedó junto a Lara (17) y Facundo (6) en su hogar y que hoy se enteró que Mariano participaría del programa.
Tras muchas preguntas, en las que estuvo al límite de tropezar más de una vez Mariano logró consagrarse. “Mariano, ¡¡¡tres millones de pesos!!! Mariano Cáceres, empleado de seguridad privada, está de licencia, es de Santiago del Estero y está en Buenos Aires con su hija”, exclamó el conductor.
Tras recibir el cheque, Mariano Cáceres y su hija emocionaron a todos tras fundirse en un abrazo repleto de lágrimas con su hija. Algunos, entre ellos Pampita no pudieron evitar las lágrimas.
Mientras el conductor comentaba, la jurado se emocionó y aplaudió con toda su alma el mérito del santiagueño: “Con su hija, preciosa, con Agustina, ¡¡¡ganaron, ganaron los tres millones de pesos!!! Qué buen papá tenés Agustina, qué buen papá tenés”, finalizó Kaczka.
Tras su consagración, Mariano confirmó que irá por los seis millones para seguir en el concurso y poder costear definitivamente el tratamiento de su hija.
