Se trata de un fallo “histórico” dictaminado en Francia, donde comenzó la acusación formal al mandatario por el uso de armas químicas contra su propia población en 2013, entre otros crímenes.
El Tribunal de Apelación de París validó ayer una orden de detención contra el presidente sirio, Bashar al Assad, que queda así desposeído de su inmunidad como jefe de Estado por su responsabilidad en varios ataques con armas químicas en 2013, y que tiene validez en toda la Unión Europea.
La causa judicial, abierta en Francia, señala también a otras personas del entorno del presidente sirio, entre ellos su hermano, Maher al Assad.
Este dictamen fue considerado “histórico” por las abogadas de la acusación particular, que en declaraciones a la prensa destacaron que es “la primera vez” que una jurisdicción nacional reconoce que la inmunidad personal de un jefe de Estado en ejercicio no es absoluta.
Las letradas, que no se quisieron pronunciar sobre el fondo de la resolución porque todavía no habían tenido tiempo de examinar la argumentación, destacaron en cualquier caso que viene a certificar la vigencia de la euroorden emitida por un tribunal de instrucción francés el pasado mes de noviembre.
En la práctica, precisó Clémence Witt –una de las abogadas de la acusación particular–, eso significa que Al Assad debería ser detenido en caso de entrar en cualquiera de los países de la Unión Europea. Witt recordó que, en principio, las euroórdenes tienen un carácter casi automático, aunque en la práctica el país en cuestión puede hacer un examen formal antes de entregar a una persona reclamada por otro Estado de la UE. La abogada señaló además que esta orden de arresto francesa también podría ser utilizada por países extraeuropeos.
La acusación particular se felicitó porque la validación del mandato de arresto significa igualmente que Al Assad será juzgado, y eso podría organizarse incluso sin estar presente.
La Fiscalía Nacional Antiterrorista había pedido a la sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París que se anulara la orden de arresto por considerar que la inmunidad de un jefe de Estado en ejercicio sólo puede decaer por procedimientos de jurisdicciones internacionales, como la Corte Penal Internacional, y no de instancias nacionales.
Acusaciones criminales
Al Assad está acusado de ser cómplice de crímenes contra la humanidad por los ataques con gas sarín en varias ciudades sirias en agosto de 2013 que, según los servicios secretos estadounidenses, causaron más de mil muertos.
También están inculpados el hermano del presidente sirio, Maher, en tanto que jefe de una unidad de élite del Ejército, y dos generales, pero ninguno de estos tres podían ampararse en la inmunidad presidencial.
Los ataques se llevaron a cabo en el marco de la represión del régimen de Al Assad contra las protestas en su contra iniciadas en 2011 y que derivaron en una guerra civil que ha provocado desde entonces cientos de miles de muertos y millones de desplazados dentro y fuera del país.
Actualmente, las autoridades sirias, con apoyo aéreo de Rusia, llevan semanas embarcadas en una operación en diversas áreas en las que Estado Islámico sigue activo, en el marco de un repunte de los ataques por parte de los yihadistas, que atacan población musulmana y cristiana por igual en toda la región.