El Presidente renovó sus críticas contra el máximo tribunal por suspender las elecciones en Tucumán y en San Juan. No habló sobre las cuestionadas candidaturas de Juan Manzur y de Sergio Uñac sino del accionar del Poder Judicial.
El presidente Alberto Fernández y el resto de los referentes del Frente de Todos encontraron en el nuevo conflicto con la Corte Suprema de Justicia una causa para aglutinarse en la aún indefinida carrera electoral pero también para instalar un debate ajeno a las preocupantes e irresueltas dificultades económicas.
En el gobierno nacional redoblaron los mensajes contra el máximo tribunal: el presidente Fernández tomó la posta y salió a hablar por cadena nacional para repudiar las medidas cautelares que suspendieron las elecciones (en la categoría a gobernador y vicegobernador) en San Juan y en Tucumán.
“La Corte Suprema de Justicia ha demostrado, una vez más, que es capaz de adecuar sus decisiones a las necesidades políticas de la oposición y así, otra vez, ha dejado en evidencia su carácter antidemocrático y su profunda desatención al régimen federal que nos gobierna”, lanzó el primer mandatario.
En mensaje grabado en la Quinta de Olivos no incluyó ninguna mención a las cuestionadas candidaturas de Juan Manzur y de Sergio Uñac que desataron el conflicto, sino que se enfocó en denunciar la “manipulación de los tiempos electorales” en las mencionadas provincias.
Esa omisión no fue casual, porque constitucionalistas y hasta algunas voces relevantes del oficialismo señalaron que Manzur y Uñac no cumplen con los requisitos establecidos en la Constitución de sus respectivas provincias para volver a pelear por la vicegobernación y la gobernación, respectivamente.
“Yo creo que los dos candidatos impugnados estaban inhabilitados constitucionalmente”, afirmó Graciela Peñafort, la directora de Asuntos Jurídicos del Senado de la Nación y una de las letradas de confianza de Cristina Kirchner. En declaraciones a Radio Con Vos, Peñafort sí cuestionó la intervención de la Corte y la celeridad para actuar en la antesala de los comicios.
Atento a esta situación, Fernández alertó que “el Poder Judicial tiene que entender que no puede manipular los tiempos electorales bajo el pretexto de preservar principios republicanos”. “No puede ser que sigan avasallando a los pueblos del interior de la patria, preservando los intereses de sus amigos políticos o sus amigos empresarios”, manifestó Fernández.
“Evidentemente, los jueces que aceptaron ser designados por decreto por Mauricio Macri, siguen respondiendo a sus órdenes. Tampoco es casual que hayan dictado la suspensión de los comicios en el mismo momento en el que se desarrollaba una sesión del Juicio Político, en el Congreso de la Nación, donde se estaba denunciando a miembros de la Corte por supuesta corrupción en el manejo de fondos públicos”, agregó.
En su cadena nacional, el Presidente se mostró alineado con la cruzada de Cristina Kirchner al indicar que “se trata del mismo Poder Judicial que persigue en forma sistemática a la Vicepresidenta de la Nación con argumentos forzados, desatendiendo su derecho de defensa y dictando sentencias fundadas en relatos redactados en mesas judiciales”.
“Se han convertido en el brazo opositor y de los grupos concentrados de poder económico y mediático. Además de desconocer el federalismo estos jueces desconocen también la división de poderes”, agregó Fernández.
Las palabras del Presidente se convirtieron en la punta de lanza de una acción conjunta del oficialismo. Aunque Cristina Kirchner se mantuvo en silencio, sí se manifestaron algunos de sus laderos como el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, quien apuntó a los ministros del máximo tribunal: “Tipos que no han sido elegidos por el pueblo creen que pueden llevarse puesto un proceso electoral”.
Hasta la CGT, que recientemente alertó sobre la frágil situación económica y social, se sumó a la cruzada y difundió un comunicado para rechazar lo dispuesto por la Corte porque “genera un grave antecedente institucional”.
Por su parte, Sergio Massa decidió mantenerse ajeno a la cruzada. El ministro de Economía optó por ratificar un sugestivo mensaje sobre la interna en el Frente de Todos que alimenta las especulaciones de quienes lo proyectan como uno de los candidatos presidenciales. “Los que gobernamos tenemos que demostrar cómo resolvemos los problemas del presente y cómo diseñamos el futuro, y no andar perdiendo el tiempo e internas estériles que sólo resuelven vanidades políticas”, reiteró.
Por lo pronto, Uñac confirmó que acatará el fallo de la Corte. “Lamento que una decisión externa, inoportuna, rodeada de subjetividades partidarias y desconsiderada de nuestra autonomía, suspenda y altere nuestro proceso electoral”, se quejó el gobernador que busca un tercer mandato.
Y Manzur sólo indicó que están “analizando la situación” y pidió “esperar un poco más”. “Estoy tranquilo; estas cosas pasan en la política”, expresó en declaraciones al diario La Gaceta.
“Hay una medida cautelar, eso es todo lo que pasó, pero tarde o temprano los tucumanos irán a votar y en el cuarto oscuro están solos y son libres de elegir”, agregó y remarcó que el gobierno provincial “acata y respeta” la decisión de la Junta Electoral Provincial, que el martes por la noche resolvió suspender las elecciones en todas sus categorías.