Lo dispuso el juez Ernesto Kreplak a pedido del fiscal de Lomas de Zamora, Sergio Mola. En la causa, el exjefe de gabinete bonaerense, la conductora y la modelo son investigados por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
En el caso en el que se investiga la posible comisión de delitos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito en la que se encuentran imputados el exjefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Martín Insaurralde; su exesposa y conductora Jesica Cirio y la modelo Sofía Clérici, el juez federal Ernesto Kreplak dispuso el secreto de sumario, rescató Télam de lo informado por fuentes judiciales. El pasado viernes, el magistrado había ordenado levantar el secreto bancario y fiscal de los implicados.
El magistrado lo hizo a pedido del fiscal federal de Lomas de Zamora Sergio Mola, en el marco del expediente en el que se investiga el patrimonio de Insaurralde, el viaje que compartió con Clérici en Marbella (España) y los pormenores del divorcio entre el ex intendente y la conductora televisiva.
La implantación del secreto de sumario, por lo general, está vinculado a la voluntad de los investigadores de avanzar con medidas de prueba que podrían frustrarse si se filtraran.
El juez del caso ya accedió a los registros migratorios de los imputados, a la vez que dispuso días atrás el levantamiento del secreto bancario, financiero y bursátil de los tres implicados, tal como informó Télam oportunamente.
El lunes se conoció la información de que Clérici había presentado un escrito con el que pidió ser sobreseída en la causa, al sostener que el viaje a Marbella fue “personal” y que el yate era un préstamo de un amigo.
En el escrito, que llevaba su firma y la del abogado Martín Larralde, la mediática enfatizó que no “quebrantó ninguna norma penal” y que las fotos subidas a sus redes sociales -entre ellas aquella en la que mencionó a Insaurralde- reflejaron un “viaje personal”, informaron fuentes judiciales.
El viaje a Marbella, España, tuvo como objetivo visitar a una hermana que vive en esa ciudad en septiembre pasado, y el barco en el cual se fotografió junto a Insaurralde “es propiedad de un amigo personal” de su pariente que “lo prestó para realizar apenas un día de navegación por el mar Mediterráneo”, según explicó.
También se refirió a los objetos que aparecen en sus imágenes en redes sociales -carteras y/o relojes de marca- y dijo que se trata de “obsequios” de amistades por su cumpleaños, que “no tienen conexión alguna con los hechos ni con las personas denunciadas”.