Ayer un juez ordenó suspender la pericia al celular el hombre que salpica al gobierno de Axel Kicillof.
Reabrieron la investigación contra Julio “Chocolate” Rigau, el puntero del PJ que había sido detenido con 48 tarjetas de débito de empleados de la Legislatura bonaerense.
La Cámara de Casación revocó el polémico fallo que, en un principio, anuló la investigación. El tribunal hizo lugar a los recursos presentados por el fiscal general de La Plata y por Poder Ciudadano.
Vale destacar que este miércoles, un juez ordenó suspender la pericia al celular el hombre que salpica al gobierno de Axel Kicillof.
“El órgano jurisdiccional recurrido ha actuado, al dictar la resolución cuestionada, excediendo los límites normativos que determinaban su capacidad material de conocimiento y por tanto, sin tener habilitada su jurisdicción”, dice el fallo firmado por los jueces María Florencia Budiño, Fernando Luis y María Mancini.
“La Cámara actuó́ por fuera de su jurisdicción en tanto según la legislación procesal vigente, la orden de detención dictada por el juez competente no resulta impugnable por vía de habeas corpus en razón del veto producido, en el art. 405, segundo párrafo del ritual, por el decreto de promulgación 2749/04 (con respecto a la ley 13.252), con lo cual se concluye que contra tal acto jurisdiccional no resulta posible interponer una acción de hábeas corpus”, sostuvo en su voto la jueza Budiño, según informó Infobae.
Una investigación que fue anulada en tiempo récord
El 21 de septiembre pasado dos jueces de la Cámara de Apelaciones de La Plata ordenaron anular la causa contra Julio “Chocolate” Rigau. En tiempo récord, el puntero se retiró a su casa, con el dinero que le habían secuestrado y las 48 tarjetas de debido.
La Cámara consideró que la requisa se hizo de manera ilegal y que esa ilegalidad invalidaba todo lo actuado en el expediente. Los jueces Juan Alberto Benavides y Alejandro Gustavo Villordo votaron a favor mientras que Fernando Jorge Mateos se pronunció en contra.
“No puedo dejar de mencionar el estrépito social o el desconcierto y descrédito para el común de la gente que se derivaría de una decisión como la perseguida”, expresó Mateos.
