La secretaria General culpa a dos colaboradores de jugarle sucio en el proceso de negociación con el Gobierno y quiere que se vayan. A ella la acusan de mentirles a los afiliados.
A tan sólo dos meses de haber asumido al frente del gremio docente más importante de la provincia, las autoridades de UDAP quedaron duramente enfrentadas y parece no haber vuelta atrás. Todo sucedió en el proceso de análisis de la oferta de aumento salarial que les había presentado el Gobierno. La secretaria General, Patricia Quiroga, asegura que intencionalmente le hicieron creer que los afiliados habían aceptado y que después, a último momento, le informaron lo contrario. El secretario Adjunto afirma que le avisó a tiempo y que ella mintió, porque quería forzar la situación para convalidar la oferta oficial.
Todo sucedió el martes. UDAP realizó ese día un plenario de delegados para votar y decidir si le decían que sí o que no a la propuesta que hizo el Ejecutivo provincial el lunes. Según contó Quiroga, primero le dijeron que los mandatos de los afiliados eran por la aprobación y que avanzó con la confección del acta respectiva, para llevar la respuesta a la mesa de paritaria. El tema es que cuando estaba todo resuelto, relató, se le acercó la secretaria Gremial, Carina Lobos, y le dijo que estaba equivocada y que los docentes rechazaban lo ofrecido por el Ministerio de Hacienda.
La situación generó desconcierto en la paritaria. Primero trascendió que UDAP estaba de acuerdo y cuando parecía que los tres gremios, sumados UDA y AMET, iban a forma un acta acuerdo con el Gobierno para instrumentar el aumento de haberes para el sector, la misma Quiroga tuvo que informar que había habido un error interno y la negociación no llegó a buen puerto, al punto que sigue abierta y no se sabe qué pasará.
Quiroga salió a responsabilizar públicamente a Lobos y su secretario Adjunto, Damián Ocampo, por lo sucedido. Dijo que el hombre le afirmó en el plenario que los afiliados habían aceptado la oferta oficial y que a pesar de que ese encuentro duró cuatro horas, ni él ni la secretaria Gremial le informaron que no era así. La mujer lo hizo recién al último, dijo, dejándola expuesta.
En una serie de whatsapp cruzados entre los dirigentes, Ocampo acusó a Quiroga de “mentir” en el plenario. La titular del gremio le respondió por mensaje que es “un caradura” e insistió en que él le aseguró que la mayoría de los afiliados votaron por el “sí”.
Más tarde, en declaraciones a Radio Sarmiento, Ocampo señaló que Quiroga mintió porque quería “manejar” las cosas para hacer que UDAP aceptara la propuesta, en una suerte de acusación de que juega para las autoridades de Hacienda y de Educación. Ella no se quedó callada, lo desmintió y espetó que tanto su segundo como Lobos no son confiables, al tiempo que recordó que el hombre presentó una nota en el Ministerio de Trabajo pidiendo que se suspendieran las elecciones que finalmente lo dio como ganadores y les permitió conquistar UDAP.
Quiroga aseguró que todo el plenario está de testigo de lo que pasó e incluso sostuvo que el acta firmada por Ocampo y toda la mesa decía que los afiliados aceptaban la propuesta. La dirigente manifestó que “la confianza se rompió” y buscará que los dos se vayan. El Adjunto dijo por su parte que no dará un paso al costado y que, en todo caso, lo tendrán que echar.
