La mayoría de las funciones llegan primero a las versiones beta para Android,
Las versiones beta de WhatsApp se han convertido, durante los últimos años, en la mejor fuente de información sobre aquellas funciones en las que Meta está trabajando y que, por lo tanto, todavía no son oficiales. Ya sea porque en dichas versiones se activa aquello que se quiere probar, o porque se añade alguna referencia a esa nueva función en el código de dicha app, hay una buena cantidad de lupas que escudriñan al detalle todas estas nuevas versiones, en busca y captura de cualquier señal de novedades.
Por norma general, la mayoría de las funciones llegan primero a las versiones beta para Android, aunque algunas debutan en la app para iOS, y la app nativa para Windows suele ocupar siempre el tercer puesto en esta clasificación, ya que además también tiende a tener cierto retraso en la recepción de dichas novedades, con respecto a las aplicaciones para los sistemas operativos móviles. Algo comprensible, por otra parte, pues el grueso del uso del servicio se concentra en los smartphones, que son, además, su ecosistema primigenio.
No obstante, la versión web de WhatsApp ha ido ganando tracción con el tiempo. No cuento con datos globales, pero fijándome en los de mi entorno más cercano sí que veo que el patrón de uso más común es el que combina la app para Android o iOS con la interfaz web, que resulta mucho más cómoda cuando nos encontramos frente al PC. En mi caso, siempre que estoy utilizando el PC empleo WhatsApp a través de su interfaz web, y llega al punto de que, cuando tengo que mantener una conversación mínimamente larga a través del servicio, vuelvo frente al PC si no estoy con él en ese momento.
Pese a ello, esta versión no contaba, hasta ahora, con una versión beta pública. Sin embargo, esto ya es cosa del pasado, y es que Meta ha empezado a desplegar la versión beta de WhatsApp web. Para poder acceder a la misma son necesarias dos condiciones. La primera es contar, como mínimo, con la versión 2.2318.11 de WhatsApp web, y la segunda, que ya no depende de nosotros, es que nuestra cuenta de usuario del servicio se encuentre entre aquellas a las que ya ha llegado el despliegue.
Puedes comprobarlo (y activarlo, si tienes la posibilidad y deseas hacerlo) del siguiente modo:
- Accede a WhatsApp web a través de la URL habitual, e inicia sesión si no lo habías hecho anteriormente.
- En la interfaz principal, haz click en los tres puntos verticales que se muestran a la derecha de tu imagen de avatar, en la parte superior izquierda de la interfaz.
- En el menú que se mostrará, haz click en «Configuración» y, a continuación, desplázate hasta la parte inferior de la lista de opciones, y haz click en «Ayuda».
- Si la versión beta ya está disponible para tu cuenta, en la parte inferior izquierda verás entonces la opción «Unirse a la versión beta». Tan solo tendrás que marcarla y ya estarás dentro, algo que podrás confirmar visualmente, ya que el texto «Beta» se mostrará a la derecha de tu imagen de avatar.
No hay, de momento, novedad alguna en la beta de WhatsApp web con respecto a la versión normal, pero esto es lógico, ya que este modo acaba de ser desplegado. No obstante, merecerá la pena tenerlo al ojo, pues tarde o temprano sí que empezarán a mostrarse avances allí. En mi caso he tenido suerte y ya se ha activado, así que estaré más atento que nunca.