Son estimaciones de las autoridades del país vecino que se vio afectado por una tormenta que dañó los caminos. Hay 3.000 camiones que esperan cruzar la cordillera.
Las autoridades chilenas estiman que el paso internacional estará nuevamente operativo a partir de este viernes, aunque solamente se permitirá la circulación de vehículos livianos. Las labores de despeje de la ruta comenzaron el lunes y se prevé que llevarán tres días completar la limpieza de la zona afectada.
No obstante, las autoridades del complejo Los Libertadores que la intransitabilidad se extienda al menos una semana más, lo que genera más preocupación por los 3.000 camiones que están aparcados en distintos puntos de Mendoza a la expectativa de que haya noticias y puedan continuar el viaje.
“Es probable que en dos o tres días se logre despejar la Ruta Internacional 60-CH para permitir el tránsito de vehículos livianos a través del Complejo Fronterizo Los Libertadores”, informó Yanino Riquelme, secretario regional ministerial (seremi) de Obras Públicas.
El funcionario explicó que hay seis puntos de la ruta afectados entre Guardia Vieja y Los Caracoles, lo cual está dificultando la circulación de camiones. Las imágenes publicadas muestran la ruta completamente destruida con grandes piedras que impiden el paso por el corredor internacional.
Las autoridades argentinas han calificado lo sucedido del otro lado de la cordillera como una “catástrofe climatológica” que ha provocado una semana de cierre en la ruta.
“La Dirección de Vialidad está llevando a cabo tareas de despeje y reposición del pavimento en el corredor internacional”, informó la Delegación Presidencial Provincial de Los Andes en un comunicado. Y se sabe que se trabaja a contrarreloj para que se pueda restablecer la normalidad, luego de las precipitaciones que azotaron Chile.
Por otro lado, alrededor de 3.000 camiones se encuentran estacionados entre Luján de Cuyo y Uspallata, esperando poder cruzar, y la misma situación se ha evidenciado en el país vecino.
Hay que destacar que tampoco se pueden transitar por el Paso Pehuenche, que quedó más afectado por las tormentas y en este caso Vialidad Nacional, dio el peor panorama indicando que es posible que la reconstrucción total del camino demore un año.
Durante el día de hoy, un equipo estará haciendo un relevamiento para determinar las consecuencias de la crecida del Río Grande y avanzar con un proyecto para su posterior llamado a licitación.
