Se trata de Leblin Cream, un licor estilo Baileys con toques regionales que es creado y fabricado en Villa Krause y se vende al mundo.
Actores, estrellas de la moda e influencers se reunieron este fin de semana en uno de los boliches más recurridos por los famosos en Palermo, donde se llevó a cabo la Hype Experience Buenos Aires. Allí hubo distintas celebridades de Argentina, que en su mayoría quedaron encantadas con una bebida alcohólica que fue la más elegida de la noche y que orgullosamente se produce en San Juan.
Se trata de Leblin Cream, un licor al estilo del famoso Baileys, pero con toques regionales. La bebida alcohólica es fabricada por Luca Piza y Martín Paternó, dos amigos que hacen su magia en Villa Krause, ciudad del departamento de Rawson.
Leblin Cream es un licor de crema con base de whisky, café, crema de leche, dulce de leche y cacao que durante el fin de semana fue la bebida que tomó Moria Casán, Alfa de Gran Hermano y otras celebridades famosas.
Los dos creadores y empresarios dialogaron con Tiempo de San Juan y contaron que todo comenzó cuando vivían en Buenos Aires y probaron el Baileys. Luego buscaron adaptarlo a un público más nacional y con un toque regional.
Hecho en San Juan
Cuando ambos jóvenes probaron el Baileys por primera vez quedaron encantados, pero cuando fueron a comprarlo notaron que era una bebida muy cara y decidieron comenzar a estudiar un poco más el producto, para ver qué ingredientes llevaba y cómo se hacía.
Ese proceso duró poco más de dos años. “Hicimos como 80 pruebas a lo largo de todo ese tiempo, hasta que en una oportunidad viajamos a Mendoza y nos encontramos con una enóloga sanjuanina que nos dio otra receta, otras proporciones.”, contóó Luca a Tiempo de San Juan.
Fue entonces que ambos amigos hicieron caso al pie de la letra con la receta de la enóloga y consiguieron el aroma y el sabor que buscaban. Pero por sobre todo, en San Juan encontraron su lugar ideal para crear.
“Una vez instalados en San Juan y con la receta ya lista comenzó la idea de comercializarlo. Hicimos un estudio de mercado y pusimos el producto en frascos muy pequeños que le íbamos entregando a todas las personas que nos íbamos cruzando”, agregó Luca.
Con perseverancia, las ventas comenzaron a aumentar y Leblin Cream fue ganadose un lugar en vinotecas, bares y restaurantes. Luego, registraron la marca, alquilaron un local y consiguieron todos los permisos necesarios para su comercialización.
Respecto al gran éxito que consiguieron el último fin de semana en Bueno Aires, en la Hype Experience, los creadores del licor se mostraron alegres y entusiasmados con seguir creciendo.
“Fue una locura. Todos quedaron encantados y hasta se sacaron fotos con el producto”, cerró Luca.
