El DT no contará con el ex Banfield en el Superclásico y analiza varias opciones para que jueguen en su lugar, aunque anoche ya dio lo que podría tomarse como un indicio.
Después de la alegría por el triunfazo en tierras chilenas que lo afianza en la cima del Grupo F de la Copa Libertadores, Boca no tiene tiempo para detenerse en disfrutar demasiado de los tres puntos porque en un puñado de días se le viene el Superclásico y ya debe cambiar el chip. El plantel tendrá el día libre para recargar energías tras regresar al país, mientras que Jorge Almirón comenzará a diseñar el plan de juego para ir al Monumental.
Tras el sólido triunfo de noche en la Copa Libertadores contra Colo Colo, todo parece indicar que el entrenador mantendrá la base del equipo frente al eterno rival, aunque con un asterisco: no podrá repetirlo completamente por la suspensión de Martín Payero. El nacido en San Miguel tendrá que hacer un cambio obligado por la expulsión del volante frente a Racing y, a tres días del partido clave en Núñez, analiza las distintas opciones para reemplazarlo.
¿Qué variantes tiene Almirón para reemplazar a Payero en Boca?
¿Cuáles son? A priori, son tres los que corren con más fuerza por estas horas: Cristian Medina, Equi Fernández y Óscar Romero. Los mediocampistas, cada uno con características bien distintas -incluso también del propio Payero-, se disputan el lugar del exBanfield ni más ni menos que para el Superclásico.
El primero, le aportaría movilidad, despliegue e intensidad a un Boca que buscará dar el golpe ante el puntero del campeonato; el segundo, le daría un juego más posicional, de mayor contención en el medio para acompañar a Alan Varela y, por supuesto, más control de pelota en los papeles; mientras que el tercero sería una variante más ofensiva para unir hilos entre los volantes y los delanteros, sobre todo a partir de su buen pase.
Almirón cuenta con diferentes alternativas y con el correr de la semana terminará de tomar una decisión en relación al reemplazante de Payero, pero lo cierto es que ayer dio lo que podría tomarse como un indicio, o al menos una prueba que le funcionó: cuando salió el jugador de 24 años, quien ingresó fue Medina. Si bien no da seguridad de cara al duelo con River, ya que es otro escenario, rival y contexto, puede tomarse como una señal...
