El conductor y músico respondió de todo frente a Crónica TV y aclaró la situación que vivió en la última gala de los Martín Fierro.
Tras ser acusado de abuso sexual por Lucas Benvenuto, por decisión de Telefe, Jey Mammón fue desplazado de La Peña de Morfi y desde ese momento que se mostró alejado de las cámaras. Sin embargo, decidió aparecer en las últimas semanas, incluso asistiendo a la entrega de los Premios Martín Fierro.
Cabe recalcar que además, ratificó la denuncia por calumnias e injurias contra algunos periodistas en específico. Yanina Latorre, Flor de la V, Ángel de Brito y Karina Mazzocco, son algunos de los nombres que él mismo mencionó.
Cuando se le consultó a Jey Mammón sobre la situación de la foto viral en la que se lo vió solo en una mesa mientras se celebraba la ceremonia, este contestó: “Hubo muchas personas con las que me saludé, porque me saludé con mucha gente, es la realidad”.
Además, agregó que sus ex compañeros del programa de Telefé, abandonaron el sitio porque no ganaron el galardón a mejor programa musical. También, Jey comentó de forma contundente qué hizo cuando sucedió ese momento: “Yo quiero el oro, me quedo hasta el final porque el oro lo puede ganar cualquier”.
Sobre su llegada tardía a la premiación, el humorista contó que fue planeado para evitar “ensuciar la entrada”. También, comentó que llegó a los Martín Fierro para encontrarse con gente y que, según su perspectiva, lo disfrutó.
Jey Mammón habló de su situación actual con Lucas Benvenuto
Sobre su situación actual con Lucas Benvenuto, tras la denuncia mediática y la repercusión que tuvo en su vida, Mammon respondió: “En lo personal me siento mucho mejor, por eso puedo expresar lo mismo de siempre pero desde otro lugar”. Como agregado, Jey dijo que se siente que su discurso sigue siendo el mismo y que se lo escucha desde otro lado.
Durante la gala más importante de Argentina, el joven patinador realizó una transmisión en vivo, donde repudió la presencia del presentador en la premiación. Apareció con una cinta en la boca y levantó carteles que decían “los derechos del niño no debe ser vulnerados”, “jamás” y “con los niños no”.