Se trata de personas que vivían cerca de zonas donde se hicieron ensayos y detonaciones nucleares durante 2006 y ahora viven en el sur.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur anunció que planea realizar pruebas de radiación a 89 desertores norcoreanos procedentes de áreas cercanas a las instalaciones de pruebas nucleares de Punggye-ri, en el noreste de Corea del Norte, según informó este jueves la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
El ministerio informó que las pruebas de radiación se llevarán a cabo a partir de mayo durante seis meses en desertores norcoreanos que habían vivido en el condado de Kilju, y sus alrededores, y que escaparon del país después de su primera prueba nuclear en 2006. Anteriormente, el Gobierno surcoreano había realizado pruebas similares en 40 desertores norcoreanos en 2017 y 2018.
“Es importante comprobar de forma preventiva la posibilidad de exposición a fugas radiactivas y las condiciones generales de salud de quienes puedan haber sufrido daños a causa de las pruebas nucleares del Norte”, declaró un funcionario del ministerio a los periodistas.
Las autoridades surcoreanas sospechan que nueve de los 89 desertores que se someterán a las pruebas estuvieron expuestos a la radiación durante las pruebas nucleares. En total, 796 norcoreanos que solían vivir en áreas cercanas a Punggye-ri desertaron hacia Corea del Sur tras la primera detonación nuclear de Corea del Norte en octubre de 2006.
