Al mismo tiempo, la contraofensiva ucraniana continúa centrada en objetivos civiles y esta madrugada un dron con explosivos arrojado en una calle transitada dejó 3 muertos en Belgorod.
El primer ministro de Ucrania, Denis Shmigal, y su homólogo de Moldavia, Dorin Recean, acordaron este miércoles “desarrollar un control conjunto en la frontera estatal” entre ambos países.
Durante una reunión en Kiev, Shmigal apuntó a “avances en el desarrollo de la logística frente al bloqueo del ‘corredor de cereales’ en el mar Negro por parte de Rusia”. Shmigal subrayó la importancia de tomar “una decisión rápida sobre la construcción de un puente sobre el [rio] Dniéster y el desarrollo de pasos fronterizos y conexiones ferroviarias”. Las partes también discutieron la cooperación entre Ucrania y Moldavia en materia de una mayor integración europea.
Shmigal agradeció a Moldavia por su apoyo “desde los primeros días de la guerra” y expresó su esperanza de que la visita de hoy de la delegación moldava contribuya a “un mayor desarrollo de los contactos bilaterales y al diálogo productivo”. Por su parte, Recean reiteró la solidaridad de su país con Ucrania y agradeció a Kiev por defender a Moldavia, a Europa y los “valores fundamentales sobre los que se construyen nuestras sociedades”.
Por otra parte, el gobernador de la región rusa de Bélgorod, Viacheslav Gladkov, ha informado por Telegram de la muerte el miércoles de tres civiles, como consecuencia de un ataque ucraniano con drones. “Las fuerzas armadas ucranianas lanzaron un aparato explosivo desde un dron, cuando las personas estaban en la calle”, escribió Gladkov en Telegram. El gobernador ruso dijo que el ataque tuvo lugar en el territorio de un sanatorio en la localidad de Lavri del distrito de Valuisk, en Bélgorod.
“Dos hombres murieron en el lugar por las lesiones recibidas. Por la vida del otro hasta el último momento luchaban los médicos, pero las heridas que recibió eran incompatibles con la vida”, agrega en su mensaje el gobernador de Bélgorod.
Mientras tanto, en Moscú, un dron “fue neutralizado por medios de guerra electrónica y, al perder el control, entró en colisión con un edificio en construcción en el complejo de la City de Moscú”, el distrito financiero de la capital, dijo el Ministerio de Defensa ruso, que culpó a Ucrania del ataque. Según el alcalde de la capital, Serguéi Sobianin, varias ventanas de dos edificios resultaron dañadas y que los servicios de emergencia estaban inspeccionando el lugar.