Desde que se creó, la AUH pasó de cubrir el 80% a solo 26% de la canasta básica

Desde que se creó, la AUH pasó de cubrir el 80% a solo 26% de la canasta básica
En sus 14 años de vida, el poder de compra de la Asignación Universal por Hijo (AUH) se fue deshilachando.

Ni siquiera el adicional de la Tarjeta Alimentar alcanza para cerrar la brecha.

En sus 14 años de vida, el poder de compra de la Asignación Universal por Hijo (AUH) se fue deshilachando. Cuando arrancó, cubría el 80% de la canasta básica de un niño. Hoy apenas llega a al 26%. En ese período la pobreza saltó del 33 al 40%.

Así lo revela una estimación del economista Ricardo Delgado, de la consultora Analytica.

La AUH alcanza a 4,3 millones de beneficiarios menores de 18 años y 2,5 millones de titulares, los adultos que perciben esa ayuda social en sus cuentas bancarias. Surgió como un proyecto de la Coalición Cívica que fue tomado por el kirchnerismo. Así, Cristina Kirchner creó la AUH por decreto en 2009, cuando la pobreza era del 33%.

Hace catorce años, con una pobreza al menos siete puntos porcentuales por debajo de la actual, la AUH cubría el 80% de la canasta básica total correspondiente a un menor, según la medición del INDEC. “La inflación fue haciendo su trabajo, lento pero inexorable”, detalla Delgado.

“En el macrismo, el nivel de cobertura de la AUH se movió entre el 30-40%. Ahora, está en 26%. No haber atendido el drama inflacionario es letal para los chicos más vulnerables. Estabilizar es socialmente progresivo: no hay nada más regresivo que esta inflación”, sostiene el economista.

Si se computa la suba de la AUH que está prevista para septiembre y que va a llevar el monto de cobertura por hijo a $ 17.093, más la Tarjeta Alimentar de $ 17.000, la cobertura llega a un 46%.

Si bien la mayor parte de los beneficiarios de la AUH también cobra la Tarjeta Alimentar, este aporte adicional no es para todos, ya que solo cubre a los menores hasta los 14 años, mientras que la AUH se extiende hasta los 18 años.

Además Delgado destaca que mientras la AUH ya lleva 14 años y es interpretada como una “política de Estado por casi todas las fuerzas políticas”, la Tarjeta Alimentar se puso en marcha como un complemento de la AUH en enero de 2020 y no es universal.

La última medición del INDEC marca que la pobreza llegó al 39,2% en el segundo semestre del 2022. Los datos del primer semestre de este año llegarán el 27 de septiembre y todo indica que superarán el 40%. Y los registros empeorarán en el segundo semestre, de la mano de una inflación que se perfila a cerrar el 2023 con una base de 170% anual. Así, en el final de la gestión de Alberto Fernández la pobreza podría superar el pico de 42% que se dio en la pandemia y alcanzar la mayor marca desde el 44% del primer semestre del 2004.

La medición de pobreza que realiza Martín Rozada, economista de la Universidad Di Tella, proyecta una tasa 42% para el semestre que va desde febrero a julio del 2023.

Si bien la medición de pobreza del INDEC es semestral, con los datos de distribución del ingreso se puede hacer un cálculo de pobreza. Rozada indica que “los datos oficiales del primer trimestre de 2023 sugieren una tasa de pobreza de 38,7%, mientras que en nuestra estimación anterior esta tasa se estimaba en 39,8%”.

“Con esta estimación de la incidencia del primer trimestre, la tasa de pobreza del primer semestre de 2023 que publicará el INDEC a fines de septiembre se estimó en 41,5%”, precisa Rozada.

Aún con su poder adquisitivo menguado, las ayudas sociales siguen siendo clave para evitar que la pobreza sea aún mayor. Un informe el Observatorio de la Deuda Social de la UCA apunta que sin estos aportes la cantidad de personas bajo la línea de pobreza llegaría al 50%.

Una medición del economista Fernando Marull marca que la canasta de pobreza para una familia con tres hijos llega a $ 297.646, mientras las ayudas sociales para ese mismo grupo completan $ 188.093. A esto se suma el agravante de que hoy una familia en la que cobran dos salarios mínimos gana $ 225.000 y tampoco cubre la canasta. “Hoy las ayudas sociales, aun con los aumentos previstos para septiembre, están en el nivel más bajo desde abril de 2021″, remarca Marull.

Hacia adelante, las proyecciones del Observatorio de la Deuda Social marcan que se necesita un crecimiento sostenido del 2% anual durante 10 años para reducir la pobreza al 30%. Para este año se prevé que la economía caiga 3%.

Estos indicadores serán uno de los principales desafíos del próximo gobierno. “Estabilizar la economía con este panorama social es un enorme desafío político. Casi la mitad de los argentinos están en la pobreza y no van a poder soportar un ajuste mayor”, sostuvo Delgado.

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