El Gobierno anunció que el Ministerio de Economía aplicaría un alivio para los trabajadores en relación en dependencia.
Sin dar mayores precisiones, el jefe de Gabinete y candidato a vicepresidente, Agustín Rossi, adelantó que el ministro de Economía, Sergio Massa, estudia aplicar un “alivio en el impuesto a las ganancias” para los trabajadores en relación de dependencia, tanto del sector privado como público.
Fue en una conferencia de prensa en la Casa Rosada después de la reunión de Gabinete encabezada por el presidente Alberto Fernández y los funcionarios que integran la fórmula de unidad de Unión por la Patria.
Luego del guiño a empleados de clase media, con la exención del medio aguinaldo del pago de ganancias para los trabajadores en relación de dependencia que ganan menos de $ 880.000 de salario, se descontaba que para comienzos de julio el Ministerio Economía actualizaría el piso salarial bruto que exime de pagar ese impuesto que actualmente es de $ 506.230 brutos.
El Poder Ejecutivo nacional tiene la facultad de incrementar el monto salarial bruto exento de Ganancias y de ese modo morigerar el aumento de la tasa de inflación que de lo contrario sería alcanzado por el impuesto.
Este año, ese piso salarial arrancó en enero en $ 404.062 brutos, según la variación del índice RIPTE (índice de salarios formales) entre octubre de 2021 e igual mes de 2022 que fue del 78,83%. Fue una actualización por debajo de la inflación.
Desde entonces, el RIPTE hasta febrero 2023 (en 4 meses), aumentó el 25,29%, elevando el piso a $ 506.230. .
En marzo y abril, el RIPTE aumentó el 20,56%. En consecuencia, los $ 506.230 quedaron desactualizados, y más trabajadores quedaron alcanzados por ganancias.
Si se aplica el 20,56%, el piso salarial para quedar exento de ganancias subiría a $ 610.323 brutos. Y los que superen dicha suma hasta $ 703.903 quedarán alcanzados por una retención morigerada
Esta actualización no incluye al mínimo no Imponible y demás deducciones. En consecuencia, los que ganan más de esa cifra seguirán tributando más, no por tener un sueldo real mayor, sino por el efecto de la alta inflación. Y lo mismo pasa con los autónomos que están excluidos de este piso y pagan el impuesto desde el mínimo no imponible.
Por eso, Gabriela Russo, titular del Consejo Profesional de Ciencias Económicas dice que “para los contribuyentes no comprendidos en el beneficio, se aplica la escala vigente cuya última actualización tuvo lugar en octubre 2022 dejando en posición de desigualdad a ese universo de trabajadores. Siendo la naturaleza del Impuesto a las Ganancias progresivo y proporcional, se producen serias distorsiones”. Y agrega : “así podemos mencionar que la exención concedida a la primera cuota del aguinaldo ($ 880.000) hace que, por el alto impacto que produce el impuesto sobre las remuneraciones brutas, por ejemplo, los con remuneraciones brutas de $ 900.000 perciban el mismo aguinaldo que los de $ 500.000″.
Con la suba del piso a $ 610.323, unos 250.000 empleados en relación de dependencia volverán a quedar exentos del pago del impuesto a las ganancias. Y el impuesto abarcaría a cerca de un millón del empleados en relación de dependencia.
Otra variante es que el Ministerio de Economía espere a que se conozca el RIPTE de mayo – que debería difundirse la semana próxima- y ajuste el piso salarial por el RIPTE de esos tres meses ( marzo, abril y mayo).
Lo real, es que a disparada de la inflación de los últimos meses obliga al Gobierno a ajustar el piso salarial cada vez de manera más frecuente para que el impuesto no afecte el salario real de los trabajadores por incrementos salariales meramente nominales.
El alivio que representó el ajuste de mayo ayudó a destrabar las nuevas paritarias 2023 porque, de lo contrario, los aumentos salariales que se estaban acordando llevaban a que muchos trabajadores volvieran a pagar Ganancias o paguen mucho más. Esta situación volvió a repetirse en los últimos meses por las subas salariales que acompañaron la inflación.
