Según cálculos privados. Según el INDEC, el Ingreso total familiar promedio del hogar indigente fue $ 59.770 en el primer semestre vs una canasta alimentaria de $ 91.093.
Sin las ayudas del Estado, la indigencia infantil, en lugar del 13,6% habría sido del 22% y la pobreza del 56,2% hubiera saltado al 59%, en la primera mitad de 2023, según los cálculos de Ianina Tuñon, Investigadora responsable del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia (ODSA-UCA).
Así sobre 11 millones de menores de 14 años, sin las ayudas del Estado, la indigencia infantil alcanzaría a 2,4 millones, en lugar de 1,5 millones. Serían 900.000 chicos y chicas más que vivirían en hogares indigentes, así definidos porque sus ingresos no alcanzarían para adquirir una canasta básica de alimentos. Y el número de chicos pobres subiría de 6,2 millones a 6,5 millones.
Son datos anteriores a la disparada de la inflación tras la devaluación del peso de mediados de agosto.
Según el INDEC, el Ingreso total familiar promedio del hogar indigente fue $ 59.770 en el primer semestre versus una canasta alimentaria valuada en $ 91.093, una brecha o distancia del 34,4%. Y es sabido que, en promedio, en los hogares indigentes viven más chicos y reciben mayores ayudas del Estado, como la AUH y la tarjeta alimentar.
Para Ianina Tuñon, “en el actual contexto las transferencias de ingresos como la AUH y la Tarjeta Alimentar, así como el Progresar, cumplen un rol clave pero muy insuficiente ante la inflación que golpea especialmente a los hogares más vulnerables que destinan la mayor parte de sus ingresos a la alimentación. Los adolescentes son la población con mayor pobreza entre los niños/as. Es hora que sean considerados en el marco de la Tarjeta Alimentaria y que se revise el pago diferido del 20% sujeto a condicionalidad que se percibe al año siguiente sin ninguna actualización. Estas condicionalidades deben ser repensadas en el contexto de un Estado tan ineficiente y que ofrece tan pobres estructuras de oportunidades en el espacio de la salud y la educación”.
Tuñon se refiere a que a diferencia de la AUH que alcanza a los padres de hijos de hasta 18 años, el Programa Alimentar comprende a los padres de chicos de hasta 14 años. En el caso de la AUH, del monto total el 80% se cobra mensualmente y el 20% restante acumulado del año anterior con la presentación de la Libreta de Asignación Anual.
Con esa Libreta se verifica “la asistencia escolar, el cumplimiento del calendario obligatorio de vacunación y los controles de salud de las niñas, niños y adolescentes que reciben la asignación”.
Cobran la AUH, 2,3 millones de madres y/o padres de casi 4,4 millones de chicos y adolescentes de hasta 18 años. Y la Tarjeta Alimentar las madres o padres que cobran la Asignación Universal por Hija/o con hijas/os de hasta 14 años inclusive.
Este mes el 80% de la AUH es de $ 13.674 por hija/o. Pueden recibir el reintegro de $ 18.800 mensuales con las compras con la tarjeta de débito en la que cobran la Asignación. A partir de septiembre los montos del Programa Alimentar son de:
- Personas que perciben la Asignación por Embarazo: $ 22.000
- Familias con un/a hijo/a: $ 22.000
- Familias con dos hijos/as: $ 34.500
- Familias con tres o más hijos/as: $ 45.500
