El Proyecto continúa progresando con vistas al desarrollo de su mina de cobre. Para ello se comenzó a trabajar en el acondicionamiento del futuro acceso a Josemaría por San Juan, denominado “Corredor Norte”, que comprende un tramo de la Ruta Provincial 430, desde Malimán hasta el ingreso al Parque Nacional San Guillermo
Transitando su etapa actual de pre-construcción, Josemaría da un paso más e impulsa diversas obras tempranas y mantenimientos viales con el fin de otorgar mayor seguridad a tareas que se requieren en esta instancia del Proyecto, situado a más de 4.000 metros en la cordillera de los Andes.
En esta ocasión, recientemente se inició el mantenimiento y acondicionamiento de una parte del denominado “Corredor Norte”, ubicado en el departamento Iglesia y que representa aproximadamente 76 kilómetros de dicho acceso.
Fernando Cola, gerente de Ambiente de Josemaría, explicó que “este mantenimiento vial permitirá continuar con los relevamientos y monitoreos relacionados a la línea de base ambiental y estudios complementarios para la ingeniería de detalle de esta futura vía de acceso al Proyecto, así como para la línea de base ambiental de la futura Línea de Extra Alta Tensión (LEAT) que abastecerá de energía a la mina”.
La intención, según detalló Cola, es “acondicionar el acceso para llevar adelante relevamientos biológicos, geológicos y paleontológicos en esa zona, y también contribuir a mejorar el acceso turístico al circuito Angualasto y el sector norte de Iglesia”. Dichas tareas también permitirán que la huella sea utilizada de manera segura con fines turísticos, ya que se trata de un camino de uso público. Es por ello que estos trabajos han sido gestados en acuerdo con la Dirección Provincial de Vialidad y el Ministerio de Turismo y Cultura.
“Nos complace mucho hablar de estas obras tempranas que van marcando el pulso de avance de nuestro Proyecto, y mucho más en este caso que se trata de tareas de mantenimiento del que será el futuro acceso a Josemaría por Iglesia, que es donde se encuentra el yacimiento”, expresó Mark Sitter, director de Sostenibilidad de Josemaría. Y agregó que “es importante destacar que la empresa que será responsable de estas tareas es iglesiana porque en este proceso licitatorio fueron convocadas de manera exclusiva empresas del departamento, en cumplimiento con nuestro compromiso de compre y contratación local”
Proceso de evaluación de oferentes de Iglesia
Para este proceso licitatorio fueron convocadas 10 empresas locales de Iglesia dando exclusividad al área de influencia del Proyecto. Dichas empresas fueron seleccionadas a partir de las que se encuentran inscriptas y pre-calificadas en CODIN - la base de datos de proveedores de Josemaría -, y a quienes se les explicó el alcance del contrato en reuniones presenciales efectuadas en nuestras oficinas de La Cobriza, en Rodeo.
Luego de una revisión preliminar, quedaron 5 propuestas, cuyos representantes visitaron el sector de la obra para conocer más información técnica de la misma. Tras una selección más rigurosa y detallada, quedaron 2 finalistas y de ellos, se eligió la propuesta técnico-comercial que mejor cumplía con los requerimientos y expectativas de Josemaría para esta obra. Se trata de la empresa iglesiana El Faro, que para iniciar su trabajo cuenta con un equipo de operadores oriundos de Iglesia.
En palabras de Daniela Ares, propietaria de la empresa El Faro, “este trabajo es una gran oportunidad y un desafío, por eso estamos muy agradecidos con Josemaría ya que tuvo en cuenta a las empresas locales para este servicio. Estamos muy entusiasmados porque entendemos que éste es el futuro portal de ingreso a la futura mina”.
Los trabajos que comprende el contrato involucran el control del polvo, mantenimiento general de caminos y remoción de nieve, limpieza de obras de drenaje (cunetas, badenes, obras de protección, encauzamiento). Además, la empresa seleccionada será responsable del suministro, transporte y colocación de material de relleno en caminos e instalación de señalización vial y turística provista por Josemaría considerando los permisos según sean aplicables, así como los planes de seguridad y construcción para asegurar su ejecución.
El desarrollo de este contrato, que estará bajo la supervisión de Josemaría y Fluor - a cargo de la ingeniería y planificación de la construcción del Proyecto -, demandará personal y servicios de apoyo que serán requeridos en el área de influencia, es decir en Iglesia. Dichas tareas se extenderán al menos hasta septiembre de 2023 y significarán un impacto positivo para la comunidad ya que inciden también en la posibilidad de contrataciones y compras locales para servicios adicionales que el contratista requiera para desarrollar los trabajos de forma óptima y segura.
